Aquí comparto con ustedes una experiencia maravillosa que tuve, mientras me encontraba de vacaciones en Orlando Fl. Realizamos un taller intensivo de repostería artística. Hicimos desde el ponque, fondant, gelatina, así como decoración infantil y hasta vestimos a una Barbie.
Quiero agradecer a mi amiga Guadalupe, una apasionada de la repostería, por haber impulsado esta iniciativa. A mi prima Angela y a su familia por abrirnos las puertas de su casa y abonar el camino para futuros cursos en esta hermosa ciudad de Florida, EEUU.
Fue una experiencia maravillosa y nosotros agradados de poder servir de medio de lo que Dios tiene para la expansión de Dulce Bendición. Que así sea.